lunes, 28 de julio de 2008

Historias de Alumnos V

¿Que es el rock?

De esta pregunta se pueden dar dos respuestas, que es lo que se puede dar como definición técnica de lo que es el rock y la otra mas bien, que representa para mi el rock.

Tomando la primera manera según lo que sé y tengo entendido es un estilo de música derivada del blues que nació alrededor de los 50’ algunos consideran que nació con Elvis. Yo creo que él lo popularizó, y nació con Chuck Berry, y luego se termino de popularizar con los Beatles en los 60’ y ahí empezó a tomar mas sonido al rock de hoy en día, sus anteriores sonaban mas a blues por lo menos a mi parecer. Igualmente el rock que a mi me gusta empieza con jimmy hendrix y luego siguio con Led Zeppelin . El rock es un estilo de música que por lo general tiene como instrumentos base al bajo, la guitarra eléctrica y la batería además de una voz, y para los entendidos de la música por lo general el ritmo es 4/4.

Otra cosa característica del rock que ahora se esta perdiendo, pero tal vez en un momento la tuvo, sobre todo en el 70’, son las letras de protestas, eso no quiere decir que todas las canciones de rock tengan letras de protestas, si no que el estilo de música que de mayor manera expresa protestas y preocupaciones sociales es el rock.

Ahora que representa el rock, es una de las mejores cosas que tengo en la vida, es inexplicable para mí porque escuchar una canción me gusta y ayuda tanto ni que es lo que me produce y prefiero no buscarle explicación no tiene sentido pero me hace feliz, es una de las pocas cosas que nunca me preocupe por buscarle explicación y tampoco me interesa simplemente me encanta y no me imagino la vida sin rock faltaría algo.

Nicolás Schain - 6º Gestión "B"

miércoles, 23 de julio de 2008

Películas

Recomendamos una serie de películas escenciales que el joven rockero no puede dejar de ver, ni llevar en su morral...

- Semilla de Maldad (Blackboard Jungle)
- Rebelde Sin Causa - James Dean
- Adiós Sui Generis
- La Canción es la Misma - Led Zeppelin
- Tommy - The Who
- Quadrophenia - The Who
- Kiss contra los Fantasmas - Kiss
- Velvet Goldmine
- Help! - The Beatles
- Gimme Shelter - The Rolling Stones
- I'm not there - Bob Dylan
- Bring on the Night - Sting
- Rattle and Hum - U2
- Imagine - John Lennon
- BA Rock '82
- The Commitments
- Tango Feroz
- Como gané la Guerra - John Lennon
- The Wall - Pink Floyd
- Rock and Roll Highschool - Ramones
- Escuela de Rock - Jack Black
- Trainspotting
- The Doors - Oliver Stone

La música se traslada a la imagen, y logra esa fusión que solo el cine puede descubrir... cuando la luz se apaga, la música comienza.

Esperamos más historias...

Martín y JP

martes, 8 de julio de 2008

Historias de Alumnos IV

Mi introducción al Rock... y a la música

1. Una historia casi sin Rock

Me parece que el título ya deja en claro que mi relación con la música durante el transcurso de mi vida ha sido escasa, por no decir casi nula, y que recién me estoy introduciendo en ella. Siempre fui una chica muy reservada respecto a este tema y me limité, recién durante los dos últimos años, a tener en el reproductor de música de mi computadora algunas canciones que yo considero más “tranquilas” para escuchar, además de la música clásica que me ayuda en momentos difíciles de estudio y que me acompaña durante la escritura.

Siempre tuve contacto con la música, eso no lo voy a negar, pero tampoco voy a dejar de decir que fue más que nada por “obligación”. Si alguien en mi casa ponía música yo la escuchaba, pero nunca por voluntad propia. Cada tanto, en el trayecto de mi vida pasaba un Beatle por aquí y un Queen por allá, pero nunca mucho más que eso.

Sin embargo, se me ha pedido que escriba sobre mi vaga relación con el Rock. No encuentro mucho para decir al respecto más allá de lo ya dicho unas líneas más arriba, por lo que me pareció oportuno tomar la sabia sugerencia que me han dado al momento que mencioné mi pequeño inconveniente para escribir sobre el Rock y sobre mí en simultáneo.

2. Una canción de Rock

“…en la vida hecha ajedrez
nunca el peón se come al rey…”
Casi estatua
Divididos, 2000

Imaginar la vida como si se viviera en un tablero de ajedrez me lleva a pensar en una vida en la cual cada individuo tiene una especie de función y ciertas limitaciones respecto a lo que puede hacer y lo que no. En una vida hecha ajedrez los individuos responden a lograr el bienestar de un “superior” pudiendo realizar sólo ciertas jugadas en la vida y aún arriesgando la propia, pero nunca la del rey a cuya seguridad nunca se deja de apuntar.

Entre las definiciones de estatua del diccionario de la Real Academia Española se encuentra una que hace referencia a quedarse paralizado por el espanto o la sorpresa. En esta vida “ajederezada” las personas juegan a ser estatuas en un sentido no tan literal de la palabra y a seguir un camino constante y sin cambios. Cada uno sigue siendo quien es sin cuestionar su propio comportamiento y sin importarle llevar una vida tan limitada.

Esta inmovilidad me lleva a plantear la idea de que un miembro de éste tablero jamás podrá superar a su superior. Porque por más que suene redundante creo yo que siempre existe en las personas el pensamiento, por más vago, mínimo e inconsciente que sea, de algún día poder progresar y llegar a obtener un puesto, un lugar, que cotice más alto, que posea más valor y que demuestre más poder. Lograr esto es difícilmente posible en sociedades en las que los miembros están habituados a pensar que la vida es simplemente la que tienen y que eso no puede cambiar. A su vez sucede que hay personas que se consideran incapaces de mejorar ellos mismos y que piensan que si otro los “superó” es porque debe estar más capacitado o ser más “apto”. Es así que continúan con sus vidas resignados y resentidos con la sociedad en la que viven.

Al detenerme en la figura y el diseño de un tablero de ajedrez logré acercarme al contexto de la racionalización de la existencia planteado por Weber. En este mundo de ajedrez, cada pieza, cada individuo es un engranaje más que ayuda al funcionamiento de todo el sistema y del cual es necesario que cumpla la función que le fue asignada para así evitar cualquier inconveniente que pueda llegar a alterar el rumbo y la actividad del mismo.

3. Una piedra en el camino

Tengo que confesar que me desvié un poco de la idea de la sugerencia que me había sido dada, aunque logré seguirle el hilo. Ésta suponía analizar una canción de Rock y, entre otras cosas, escribir sobre su relación con la sociedad y algún momento histórico por el que la misma haya pasado.

Y todo comenzó con ese propósito, aunque terminó en un análisis, sin ningún planteo histórico, de algunos versos de una canción. Pero no de una canción cualquiera, sino de una de Rock. Y no de cualquier grupo, sino de uno del que sólo estaba al tanto de su existencia y nombre y cuyo contenido desconocía.

Por eso, aunque el Rock en sí pudo haber sido una piedra en mi camino que provocó un desvío en mi texto debido a mi ignorancia sobre el mismo, éste continuó girando en torno al Rock y a la sociedad y me permitió conocer y acercarme más a este tipo de música; nuevo para mí, aunque viejo para otros.

4. Una piedra para el futuro

Considero a este texto como la base y el inicio de mi relación formal con el Rock a través del cual logré conocer y familiarizarme más con este estilo. Éste es fundamental para así algún día poder escribir sobre lo que en un principio me fue solicitado y relatar este momento como el comienzo de una historia que no existía hasta el momento: la del Rock y yo.
Ivana Goren - 6 TIC "B"

viernes, 4 de julio de 2008

Historias de Alumnos III

Poesías de Vinilo

Una estantería de unos abuelos, que al no encontrar un Lugar adecuado en esa casa en construcción de Pasaje Estrada 263, fue a parar a mi cuarto de paredes vírgenes y gris cemento.

Esa estantería, que en su tiempo había albergado alguna colección de adornos europeos que ahora yacían sin honor en el basural municipal, era hogar de unos flamantes Long Play de Sui Generis que mi viejo no pudo ni quiso nunca regalar pese a los intentos de mi madre que los consideraba objetos antiestéticos contrarios al arte o la moda correspondiente de una casa moderna y de una adolescencia tan ajena como perdida. Finalmente por un capricho juvenil o una mirada irónica del destino habían ido a parar a la segunda repisa del cuarto de un pendejo de 5 años el cual nunca podría escucharlos en un viejo toca discos averiado ni mucho menos comprenderlos usando una mente tan infantil como nueva.

A pesar de todo lo expuesto nunca se me privo de disfrutarlos. Con el fin del primer grado y la lectura a mi alcance, esas letras sin sentido se trasformaron suave y lentamente como cambia el monótono rumor del mar al golpear las rocas con fuerza, en palabras como “canción para mi muerte”, esos versos no sonaban en algún reproductor sino en una mente joven con su propia rítmica y musicalidad olvidando por completo las expectativas metafóricas de un autor tan lejano y desconocido. Dominado solamente por la voz de un narrador imaginario creado por mi, un pendejo de 6 años.

Los años junto con la vida tragaron con orgullo a esas lecturas de rutina y con la llegada del tan esperado CD “Confesiones de Invierno” junto con nuestra primera computadora que por primera vez escapaba del agobiante ámbito laboral para entrar en el relajante circulo familiar. A pesar de su vejes, junto con sus parlantes cumplía la tan básica pero fundamental necesidad de emitir esas imágenes que se encontraban con mis oídos para generar una melodía armónica y precisa. Después de tiempo en espera esos antiguos versos gastados brillaban bajo una nueva alma. No solo la poesía de las canciones gritaba con pasión sus verdades sino que sobre todo ese sin sentido golpeteaba un tambor seguido de una cuerda eléctrica. Yo ya tenía 10 años y una historia de ruidos y sonidos en el camino.


David Eguia Pohle 6 TIC "A"

Historias de Alumnos II

El Rock Y Yo

Se me requirió que redacta estas hojas a base de la siguiente interrogante: ¿Cuál es mi relación con el Rock? Pregunta que ya me había hecho pero que nunca antes había hondado. Cabe aclarar que la palabra Rock no me identifica tanto, por ser mas seguidor Heavy Metal. Ya van 6 años desde que llegó a mis manos Capitol Punishment: The Megadeth Years, compilado de la banda de Dave Mustaine, o el Colorado como se lo conoce en estos parajes. Pocas cosas cambian tanto la vida de una persona como este disco me cambio a mi. Ya de chico, alrededor de los 5 años, escuchaba Appetite For Destruction y Use Your Illusion 1 y 2 de Guns ‘n’ Roses, pero nunca había sentido la emoción que me generó Megadeth, banda que hasta hoy sigue siendo mi preferida.

Luego de esto me integré a una de las tantas “tribus” que el Rock generó, la de los metaleros o heavies. Así como las demás “tribus” no se puede explicar qué es ser parte de este heterogéneo grupo, por que el corazón no habla el mismo lenguaje, no hay palabras que describan tanta pasión. Es por esto que muchos de nosotros reaccionamos agresivamente o incrédulamente cuando vemos a alguien que no aparenta ser del palo “agitando nuestra bandera”, bien en claro lo deja Ricardo Iorio con frases como “Se que pretendes hacer moda nuestro sentimiento” o en “Buscando Razón”, ya que no es lo mismo alguien que vota un partido de izquierda en las elecciones que ser un montonero (salvando obvias distancias). Los que estamos en esto es por sentimiento (locura y pasión agregaría el ya citado) y tener enfrente a una persona que nos imita por pose lo tomamos como un insulto personal.

Ser parte de un grupo así da una identidad propia, uno tiene con que catalogarse en una sociedad que constantemente esta rotulando todo, pero lo que tiene el Rock y el Metal en mi caso es que si uno es honesto en este sentimiento puede ser libre de hacer lo que desee, no le va a preocupar como lo miren los demás. Muchos creen que por ser metalero no puedo usar camisa o que si mis amigos metaleros me ven de traje van a proceder a golpearme, pero están equivocados, alguien que es honesto (o true, palabra del ingles que escuche muchas veces para definir esta honestidad) no se preocupa de eso, por que gracias a este individualismo es que estos géneros llegaron a ser tan diversos como para llegar a ver bandas que combinan la furia del Death Metal con música folklórica de sus países natales o escuchar bandas que hacen versiones de temas inesperados, como The Sound Of Silence de Simon & Garfunkel .

Una de las cosas que más valoro del Rock y sus derivados es la cantidad de músicos o de gente que toca algún instrumento que lo sigue. Yo soy uno de los tantos, al tocar el bajo y un poco la guitarra. Empecé a tocar la guitarra casi inmediatamente después de empezar a escuchar Megadeth, inspirado por los riffs de esta banda. Más tarde empecé con el bajo al estar mas a gusto con su estilo y tonalidad, sin dejar de lado “la viola”. Estos hobbies me llevaron a compenetrarme mucho más profundamente con la música, a sentirla mucho más. Esta característica nos hace un poco más idóneos por saber un poco más de lo que estamos escuchando y valoramos más el desgaste que debe ser componer algo elaborado, lo que nos lleva a saber la diferencia de tener un disco original en la mano y comprarlos siempre que el presupuesto lo predisponga (mi colección sobrepasa los 50 cd’s, cosa que asombra a muchos).

Gracias a esta pasión mía por esta musica me hice de estimadísimas amistades y probablemente mi apariencia me salvo de algunas personas. Esta apariencia nos hace blanco de varias criticas, la verdad que no es necesaria y muchos optan por no emplearla, pero imagino que parte de ser adolescente pasa por ahí, solo una vez voy a poder ser tan libre como ahora y andar impune de toda critica social por mi imagen, recuerdo estar escuchando algún disco de Guns ‘n’ Roses y decirle a mi madre que quería tener el pelo largo de Axl Rose, este deseo tardo en ser satisfecho, pero finalmente logre contar con mi larga cabellera.

Ya concluyendo quisiera decirle a cualquiera que lea estas palabras cuan importante es para mi vivir con energía y el Rock tiene mucha para dar. Y Para dar cierre a mis palabras quisiera dejar una frase y la letra de una canción (lamento que sea en ingles) que deja en claro lo ya dicho y que es para mí un himno:

Heavy Metal Universe [Hansen]

We're the masters of the wind

We're demons left in howl

We're the undefeated warriors

We have heard the call

We're the keepers and the leaders

Of the only thing we love

We're the saviours

and protectors from above

In our sky there is no limits

And masters we have none

Heavy Metal is the only one

'Cause it's a Heavy Metal universe

With a Heavy Metal sound

Masters of the thunder

Shake you to the ground

It's a Heavy Metal bomber

And it's never going down

Flying 'cross the universe

We're Heavy Metal bound

We're Heavy Metal bound

With a burning hot desire

Like a supersonic blast

We have come to show the world

That we have come to last

There ain't no way to stop us

And you'll never kill our pride

'Cause it's not only music

It's a chosen way of life

And our world has got no borders

And in union we all stand

'Cause Heavy Metal is our promised land

See my hands held to the sky

Let me rock you 'til forever

Raise your voice we're soaring high

Swear allegiance now or never

Burning up we build a flame

As we speak the oath together

Metal is our way forever...

...way forevermore

Our world has got no borders

And in union we all stand

Heavy Metal is our promised land

Friedrich Wilhelm Nietzsche: "Sin música la vida sería un error."


Ramiro Harendorf - 6 TIC "B"

martes, 1 de julio de 2008

Historias de Alumnos

Mi camino por el ROCK

Yo siempre fui un chico al que le gustaron muchos estilos de música. Me podía gustar el pop americano y el rock nacional, y meterlos en un mismo CD, quizás.
En el 2004, cuando empezaba 2do año, entré a ORT exactamente con ese gusto por la música. En mi nueva división me hice amigo de una chica que le gustaba mucho el punk. Un día, me dijo: “bajate “Minority” de Green Day”. La escuché una vez, la volví a escuchar…No podía creer que en un tema tan simple con un arpegio de introducción y después todo compuesto por quintas y una batería tan buena, terminaba siendo una canción la cual quería poner su nombre con una letra inmensa en mi cuarto.
Como cualquier persona que le gusta una canción de un grupo, conseguí algunas más de “Green Day”. Dios, me encantaron. Me hice fanático de la banda y empecé a escuchar el nuevo punk/rock.
Estando ya en 4to año, en el 2006, me pasé de sede en ORT, y en esta nueva división me hice amigo de un chico que, prácticamente iba todos los días con una campera de jean y un buzo de los “Ramones”.
Me hice muy amigo de él, por más que muchos gustos artísticos no teníamos en común. Por él conocí a mi profesor de guitarra, instrumento que me hubiera empezado a tocar desde que nací, ya que siempre me gustó cantar y quería acompañarme a mí mismo de alguna forma. En el verano siguiente, mi amigo me invitó a que pase una semana con su familia en las sierras cordobesas, donde no había muchas cosas para hacer. Con lo cual, nos pasábamos horas escuchando música en el auto de su papá.
Un día, me mostró que tenía un CD de “Queen” (banda que yo conocía solo por “We will rock you”, “We are the champions” y un par más que eran súper conocidas) llamado “A night at the opera”. Entonces me contó que el primer tema del CD, llamado “Death on two legs”, tenía una historia muy peculiar, la cual me contó y sigo sorprendido hasta el día de hoy. Por ese tema y la cantidad de efectos y acordes complejos que tiene la banda, me volví loco por “Queen”.
Escuchando “Queen”, descubrí otras bandas viejas que yo casi ni conocía, como: “Deep purple”, “AC/DC”, “Aerosmith”, “Guns N’ Roses”, “Gentle Giant” y “Focus”.
Pero bueno, paralelamente a esto, nunca dejé de escuchar bandas argentinas y uruguayas, como: “Jaime Roos”, “La vela puerca”, “Las pastillas del abuelo” y algunas otras. Y…por más que resulte medio raro, me encanta todo el CD de Mika, me parece que es un cantante genial y hace muy buena música.
No hay mucho más para contar, debido a todos estos acontecimientos, estudié un poco de piano y actualmente estoy con la batería y tengo una banda de temas muy variados…como me gusta a mí.

Guido Manuel Wainstein de 6to Medios “C”